LA ALEGRÍA PERONISTA

sábado, 17 de julio de 2010

La sesión


- La (una) versión liberal de la política indica que el Congreso es una caja de resonancia de los conflictos sociales. Uno tiene sus matices respecto a eso, pero la verdad es que no recuerdo momentos en donde esa caja haya sonado tanto. Hasta el-mensaje-de-las-urnas se hace escuchar: yo vi, la otra noche, diálogo y consenso. Al menos el diálogo y consenso realmente existente: el que implica acordar circunstancialmente en algunas cuestiones. Digan lo que digan, los 33 votos a favor fueron parte de una coalición en la que el oficialismo puso la primera minoría, pero su participación no resultaba suficiente. Y ahí entraron los 5 radicales (pocos, 5 a favor contra 12 en contra, me parece poco para el radicalismo, como me parecieron pocos los 44 diputados del FPV a favor), Cabanchik, Estenssoro, Giustiniani, Juez.

- ¡Ey, vos!, sí, sí, vos, movimiento social. Sí, vos también, organización por los derechos de algo. Aprovechá ahora que el horno está para todos los bollos. Aprovechá que la oposición necesita correr al oficialismo por algún lado. Aprovechá que el oficialismo usa banderas ajenas porque se gastó las dos o tres propias. (¿Existe todo esto?, ¿existen las banderas propias?, ¿existe “el uso político”?, ¿hacer política no es usar?, ¿importa todo eso?).

- Me quedé enganchado con lo anterior, perdón. ¿Y si lo usara, qué? Digo, ¿quién está usando a quién, en verdad?, ¿cuánto le queda al kirchnerismo?, ¿1 año, 5 años?, ¿y la ley cuánto va a durar? Otra cosa, ¿alguien piensa que esto lo capitaliza electoralmente el kirchnerismo?

- Si hubiera una página en Facebook sobre la representación política como mediación, me haría fan. El representante, valga la redundancia, vuelve a presentar una situación que de hecho ocurría afuera. Y cuando la vuelve a presentar, la modifica, mediándola: en el recibo de sueldo de un senador, más o menos debe decir eso, “honorarios de julio por mediar”. Esa situación, ese debate, comenzaba a transformarse, fuera del Congreso, en una discusión entre el Gobierno y la Iglesia (y no importa por qué, ni por responsabilidad de quién). Acá disentimos con la postura liberal: el Congreso es más que una caja de resonancia. En todo caso, elige los sonidos que quiere replicar. Nuevamente, la coalición construida alrededor de este tema superó ampliamente el clivaje kirchnerismo-antikirchnerismo. Punto para la enorme inteligencia política, de la que habrá que escribir, de las organizaciones de gays y lesbianas.

- Políticamente, el gran mérito de las organizaciones fue haber desplazado la discusión de la cuestión material de la adopción para pasar a una discusión simbólica, sobre la igualdad del acceso a los derechos. Ahí las organizaciones jugaron all-in: entendieron que no se llega hasta ahí para conseguir la de mínima. Y ganaron.

(Autora de la foto).

  • Facebook
  • Twitter

TomásTomás: El derrotero es así. Digamos que un novato estudiante de Ciencia Política leyó esta frase "toda solución es temporaria y provisional, una especie de postergación de una imposibilidad fundamental", y se enamoró perdidamente de la contingencia de lo político.

No hay comentarios:

Publicar un comentario