LA ALEGRÍA PERONISTA

lunes, 10 de marzo de 2014


Generadores eólicos: el tamaño sí importa
Cinco pymes nacionales se juntaron para crear un aerogenerador de tamaño mediano, que permite abastecer de luz eléctrica a pequeñas poblaciones rurales sin acceso al tendido eléctrico. 
El equipo instalado en Comodoro Rivadavia ya está listo para comenzar a funcionar.
Los vientos patagónicos soplan con una fuerza promedio de 40 kilómetros por hora, y por momentos no es improbable que lleguen a los 120 km/h. Desaprovechar tamaña decisión de la naturaleza significaría perder un recurso invaluable para la región.Teniendo en cuenta estas condiciones geográficas, un consorcio de pequeñas empresas petroleras fabricó un aerogenerador de 50 kW, cuyo uso se potencia con generadores a nafta para brindar luz eléctrica a pequeños poblados o escuelas rurales. Según estimaron los técnicos a cargo del proyecto, el uso de este novedoso molino permitiría un ahorro en el consumo del 50%, de forma tal que la inversión realizada –cuyo monto estimado es de 150 mil dólares– se recuperaría en poco menos de dos años.
El proyecto del molino mediano recibió financiamiento del Fondo Tecnológico Argentino (Fontar), y se complementó con la compra del CER-50K por parte de la empresa petrolera Pan American. Este capital permitió la fabricación del equipo inicial como así también poner en marcha el desarrollo de próximos modelos.
CER Patagonia es el nombre del consorcio integrado por Tecnotrol, Tool, PCP Oscar, Tubing Enterprises y ProCast. Enrique Casares, miembro de la primera firma mencionada, resaltó que la impronta del equipo radica en que las piezas son, en su vasta mayoría, de origen nacional: “En el primer prototipo las palas son importadas pero fue sólo por una cuestión de tiempo. Los próximos equipos contarán con aspas locales, ya que venimos trabajando con materiales compuestos desde hace más de 10 años”, aclaró.
El CER-50K, primer molino de su estilo en el país, cuenta con una alteración de diseño respecto a los molinos comunes, ya que se efectuó una transmisión mecánica de la rotación del eje principal –de la máquina hacia la base– donde está el generador y el sistema de control. Esto significa que cualquier posible desperfecto puede verse arreglado de forma más sencilla por tener los componentes clave más cerca del suelo.
En paralelo, el hecho de que sea mediano obedece a cuestiones sociodemográficas: en Argentina, y más aún en la Patagonia, existen grandes distancias y por ende pequeños poblados aislados que no tienen acceso a la red eléctrica. Dado que en Europa no son frecuentes estos escenarios geográficos, tampoco existen iniciativas similares, lo que convierte al CER-50K en un desarrollo aún más relevante a nivel regional.
“El molino tiene 23 metros de altura y se requirió una grúa de 30 toneladas para colocarla. Con la máquina y el sistema de control abajo, los costos de mantenimiento decrecen exponencialmente porque no se necesita una grúa para realizar las reparaciones que hagan falta. Siendo que ese es el costo más importante al momento de reparar los molinos, es una solución original a un problema muy frecuente”, consideró Casares.
Este primer prototipo está instalado en Comodoro Rivadavia, concretamente en el Predio Ferial de Exposiciones, y abastece de luz eléctrica a dicho edificio. Allí se lo testea y se lo mide, para comprobar de forma fehaciente los resultados. Cabe mencionar que esta ciudad tiene una larga tradición de trabajo con energía eólica, ya que cuenta con el Parque Eólico Antonio Morán, administrado por la Cooperativa Popular Limitada.
En este marco, es importante resaltar que el INTI cuenta con un laboratorio de ensayo eólico en Cutral-Có, a cargo del Centro INTI-Neuquén, donde en los próximos días se llevará a cabo la medición de un pequeño aerogenerador de unos 800 watts de la empresa Tecnotrol.


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